domingo, 21 de noviembre de 2010

no te vayas.

Llevo dos semanas sin saber nada de ti, no han sido del todo malas, por lo menos no he llorado todos los días al acordarme que estas conversaciones no van a llevarnos al sitio donde yo quiero.
Ahora mismo estoy hablando contigo, teniendo que estudiar dos exámenes para mañana, estaba enfadadísima, no me habías dirigido la palabra en dos semanas y parecías tan feliz, incluso más.

-Me voy, ya hablamos, si quieres claro.
-Eh, ¿pero te vas ahora a estudiar? Quédate, luego estudias, como yo.
-Ya, es que yo luego también voy a estudiar.
-Va, no te vayas.
-¿Qué me das si me quedo?
-Todo sexo
-Yo quiero algo más
-Va quédate.
(me sale una gran sonrisa)

¿De que coño te ríes? Tendrías que estar estudiando y él se aburre, por eso quiere hablar contigo. Eres la persona más imbécil que conozco.

Sexo, ojala solo quisiera sexo, sería todo muchísimo más fácil, pero yo lo quiero todo de ti, tus primeros besos del día y tus ultimas sonrisas de la noche.



Sigo hablando con él.
Te echo tanto de menos mi amor...

4 comentarios:

  1. me ha encantado... me recuerda a conversaciones jajajaja

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  2. Creo que tenemos vidas paralelas.
    Ese sentimiento no debería tenerte prisionera del tiempo y las semanas.
    Las cosas si tienen que llegar llegan.
    O eso me gusta pensar.

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  3. qué bonito... me recuerda a mi vida :)
    suele pasar, es que nunca estás satisfecha, y quieres mas y mas (todo)
    pasate :D
    http://charlotte-mrbrightside.blogspot.com
    xoxo!

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  4. Estudiar... un arma de doble filo.

    Justifica ausencias y quedadas con la misma contundencia.

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